EL ORIGEN DEL UNIVERSO
En el principio fue un mar llenándolo todo con su rechazo, con su frialdad
Un barco sin rumbo en ese mar. Cualquier barco
Donde los pasajeros y la tripulación (desde el último ayudante del que pela las patatas hasta el que controla los reactores nucleares) juegan al escondite sin ir a ningún sitio
Desde el timonel hasta el capitan, desde el que limpia las letrinas al armador, todos perdidos en su laberinto, en su interés
Ese desorden, esa anarquía, viene de lejos. Estalla el Universo y cada uno va por su lado, cada partícula sigue su dirección
Con tan sólo pasar del punto 0 al punto 1 se traza una trayectoria. ¿Qué impulso hace que la partícula pase del punto 0 al punto 1 y no al 1A, 1B, 1C...? ¿Pasa por cada punto de la trayectoria una sola partícula o varias? ¿Son infinitas las trayectorias
No ayuda mucho a la comprensión el hacer preguntas, demasiadas preguntas
Ocurre en uno mismo (barco individual cuyas velas presentan muchas caras al viento
Al astrónomo le atormentan las preguntas desde niño, los impulsos, los deseos...
Principio y final
Y ocurre también entre dos, en un grupo cualquiera, en un subconjunto y en un conjunto de no importa qué naturaleza
Ese desorden, esa anarquía. Barcos ingobernables que no llegan a puerto
En algún lugar de su trayectoria, una partícula se convierte en un cuerpo y ese cuerpo adquiere un alma. Las almas y las trayectorias se parecen, quizá coincidan como dos líneas superpuestas
Si cada estrella se consume a sí misma, si cada uno arde hacia su interior, el mar de los orígenes acrecentará su frialdad
¿Dónde encontrar las cartas de navegación? De un barco a otro, bajo un cielo oscuro
El cocinero quiere ir al Este y el arponero al Norte y el capitán al Sur
Se tiran anzuelos al agua, primero convencionales y después monstruosos
Sinuosas serpientes de mar, extensas algas flotando, colonias de medusas con luz propia
Estalla el Universo y lo que estaba unido se desata
El impacto de un partícula agrandada, sólida y ciega. Entonces se produce el cráter
Perdura por años y años. El cráter como huella de un acto de violencia
Los nervios de hierro de la embarcación atacados por el óxido
¿Cómo se espera dirigir ese barco si su destino está trazado por su impulso
Al astrónomo le atormenta la libertad de omitir las reglas. Pero esas reglas tal vez no sean las adecuadas. Todos en el barco quieren dirigir el barco
En una galera: cada remo por su lado: cada esfuerzo en una dirección
Para que la música avance, todo instrumento en su momento oportuno, otra forma no hay
Salvador Alís.
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