MANICOMIOS
Trabajas en una especie de laboratorio sociológico, un manicomio controlado por alguien en las alturas
El más loco controla a los menos locos. Hace años
Los manicomios de tu juventud, con altos muros y paredes blancas, un jardín sin flores, fuentes abiertas permanentemente
La piedra en los manicomios tradicionales ha sido sustituida por cristal
Las torres son de cristal reforzado, doble o triple cristal. A lo lejos, un mujer en cuya capa está pintado el mar
Vigilantes en las torres, algunos locos con propensión a las alturas
Sombra se estira y posa sobre la nevera gris metalizada
Un paseo por el jardín sin flores, el ruido del agua de las fuentes al caer
En un extremo de la calle, un campanario escalonado. Lo atraviesa una serpiente, una escalera de caracol
Se definen palabras en el laboratorio, se inventan palabras en el manicomio
Locos felices hacen sus dibujos, roban muñecos y los envuelven con cordones de lana
Lo mismo que hacen los gusanos
En un óvalo de lana de colores muta el gusano en otro ser
Trabajas en un lugar donde la tierra desafía al cielo y el cielo desafía a la tierra
Loco entre locos, intentando subir por la escalera
Escribes notas con un rotulador azul en las paredes blancas, dibujas las mil caras de la locura
Analizas en tu laboratorio los pros y los contras
Aclaraciones innecesarias
En los paseos por los caminos sin flores, al exterior del edificio principal, se escucha una música débil
Las ventanas en gruesos muros y sus barrotes de agua
Cristales blindados de metros de altura
Trabajas en la construcción de una fortaleza
El más loco de los locos ha dado la orden
Haces cuatro agujeros con una llave en una bolsa negra de papel. La bolsa está vacía
Letras plateadas en la bolsa indican que pertenece a Hugo Boss
El fundador de la Compañía diseñó uniformes para el ejército nazi
Muchos locos no reaccionan
Hay un loco que se piensa ángel. Hay un loco gigante y otro loco que aspira a la santidad
La nostalgia del manicomio
Hay locos eventuales que entran y salen, no duran mucho. Los funcionarios no los tratan como a locos
Dibujas al loco que toca la batería y al loco que ama sus zapatos
Rectificas dibujos de Napoleón a caballo y de sus tropas adentrándose en el frío
Sobre las torres de cristal blindado, los vigilantes mueven a los locos con su mirada
El halcón sobre la peña esboza una sonrisa
Despegan y aterrizan aviones en el patio sin fin del manicomio
El hombre con la bolsa de Hugo Boss en la cabeza. El miedo es semejante a la risa. No hay una noche
A veces una frase se rompe, a veces un sonido leve se convierte en agudo
El acto de romper es de color verde. Todo se rompe siete veces, pero esa cifra es arbitraria
Lolita podría ser la diosa de la belleza, y entonces la luna sería su figura. Sombra, la diosa del sol, tiene una doble en el manicomio. Y Nube, en todo caso, debe ser un tema aparte
Gatos en el manicomio. Suben a los tejados y obsevan a los locos
Trabajas en una especie de laboratorio donde se llevan a cabo ciertos experimentos
Los menos locos sienten temor ante el más loco
Los vigilantes hacen bien su trabajo porque contemplan el cielo
Sobre la cúpula azul que remata al manicomio, sobre su parte interior, se dibuja un cielo falso que no engaña a los verdaderos locos
Hay hermanos en extremos opuestos del manicomio, padres e hijas, y madres
Amantes a un lado y al otro del manicomio
Hay un loco cuya locura consiste en no crecer, hay un loco enano y un loco en miniatura
Las tres gatas que te acompañan no están locas. No forman parte del manicomio
A veces hay que sacar a la fuerza a un loco del manicomio. A veces el manicomio permanece cerrado
¡Son tan diferentes los veranos de los inviernos en el manicomio
Las fuentes no suenan igual en cada época del año
Se echan de menos algunos manicomios: Sevilla, Ibiza, Berlín, París, Estambul, Túnez, El Cairo, La Habana, Isla de la Reunión, Praga, Marienbad, Santorini, Lisboa, Madeira
Y se echan de menos algunos barrios (El Carmen), algunas calles (Lope de Vega, Paz, Martí
El día en que los hermanos descubren coincidencias numéricas
El día en que el ángel y el enano entablan lucha
El funcionario de bata blanca que limpia el laboratorio barre plumas y uñas quemadas
El loco que colecciona mecheros y se quema las uñas jugando
El loco que demanda un mechero para su cigarrillos
El funcionario que juega con locos sin saber que el más loco entre ellos juega con él a través de esa locura
La fascinación de diseñar uniformes en un tiempo de guerra
Vestir uniformes en un tiempo de guerra
La guerra exterior al manicomio no se parece ni afecta a la guerra interior
No hay una noche que no pienses en ti
Salvador Alís.
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