lunes, 5 de diciembre de 2016

HABLAR EN PÚBLICO

HABLAR EN PÚBLICO

El noventa por cien de las veces habla consigo mismo,
bien en silencio, bien pronunciando palabras.
Hablar con alguien supone una dificultad añadida.
Hablar para otros, un desafío.
Puede leer un papel, haber memorizado el discurso, improvisar.
Pero él prefiere otra cosa -es un hombre corriente-:
decir lo que tenga que decir, si puede hacerlo,
cuando lo tenga que decir.

Los que suelen hablar en público, mienten.
No se puede decir la verdad a los que escuchan
con las orejas de todos los días.
Es lo que piensa mientras gesticula ante el espejo como si hablara.
Él quiere orejas limpias, nuevas a ser posible,
que capten todos los matices de las ondas sonoras
que genera una vida en público al diez por cien.

Ha imaginado leer un poema, describir un cuadro, presentar
un libro propio o ajeno. El poema sería un golpe
de martillo. El cuadro no sería capaz de retener al ciervo.
El libro hablaría por sí mismo.
Es lo que piensa mientras los alicientes se pierden
y lo que se gana es todavía un crédito imposible de ganar.

¿Hablar en público contando con la ofensa previsible,
la falta de comprensión, con el escándalo? ¿Hablar en público
para deslumbrar? ¿Hablar en público para decir qué?
No estando de acuerdo con ser un hombre corriente,
duda entre el pincel y la pluma, el libro y el cuadro, la palabra
hecha imagen o la imagen hecha palabra.
Cuando llegue el momento -se dice-, cuando haya de ser.

Se imagina en un escenario frente a diez, frente a cien,
frente a mil: señoras y señores, todo lo que yo pudiera decir 
no significaría nada si antes no resolvemos 
la cuestión principal: ¿vale o no vale la pena vivir? 

Para seguir viviendo, como opción favorita, él debe cambiar.
El pincel antes que la pluma. El vino, a un lado; al otro lado,
la niebla. Se combate el invierno con vitaminas
y se espera el verano con esperanza. Cuando él descendía
por las escaleras naturales de las cuevas subterráneas,
el manantial de más arriba no dejaba de fluir.

Salvador Alís.












No hay comentarios:

Publicar un comentario