DEMOCRATURA. Recientemente he leído en algún sitio esta palabra compuesta para definir nuestro actual sistema de gobierno, pero no recuerdo dónde ni tampoco quién era su autor o quién la citaba. Como suele ocurrir a veces, mi memoria se resiente de lo cercano mientras se aferra a todo lo que se aleja. Me parece una expresión acertada, y por eso la traigo aquí para no olvidarla. Democracia y dictadura conviven y se mezclan y, al final, son la misma cosa en otro grado de complejidad.
EL GATO QUE BESA. Hace unas pocas noches tuve el sueño más hermoso. Paseando con un gato en los brazos, éste me daba constantes y cálidos besos por toda la cara. El gato era mullido y agradable; y sus manifestaciones de cariño acariciaban con uñas afiladas las cuerdas de arpa de mis sentimientos. Aunque quizá el gato fuese una gata y, esa gata, el símbolo de una mujer (o de todas las mujeres) que, a su vez, fuese el símbolo de la humanidad.
FEALDAD. Una de las consecuencias menos banales de La Crisis -al menos en esta ciudad- es que las calles se han llenado de personajes feos. Me cruzo a diario con gente horripilante. Sólo los niños y los más ancianos conservan en potencia inversa ciertos aspectos de su belleza. Los periódicos en los bares, impresos en papel barato, muestran los colores de la fealdad.
JUZGUE POR USTED MISMO. ¿Se equivocaba Ernesto Sabato cuando escribió: "Habrá siempre un hombre tal que, aunque su casa se derrumbe, estará preocupado por el Universo. Habrá siempre una mujer tal que, aunque el Universo se derrumbe, estará preocupada por su casa."?
LAVADORA. Pasamos por agua las copas para que el vino blanco y el tinto no se mezclen, para que el oro y la sangre no se enfrenten. Los colores no pueden entrar en guerra ni perder su identidad. Distintas uvas pueden compartir la copa y tener su momento.
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