LAS HOJAS MUERTAS
Me gustaría tanto que recordaras
los días felices cuando éramos amigos.
En aquel tiempo la vida era más hermosa
y el sol brillaba más que hoy.
Las hojas muertas se recogen con un rastrillo.
¿Ves? No lo he olvidado.
Las hojas muertas se recogen con un rastrillo.
Los recuerdos y las penas, también.
Y el viento del norte se las lleva
en la noche fría del olvido.
¿Ves? No he olvidado
la canción que tú me cantabas.
Es una canción que nos acerca.
Tú me amabas y yo te amaba.
Vivíamos juntos,
tú, que me amabas, y yo, que te amaba...
Pero la vida separa a aquellos que se aman,
silenciosamente, sin hacer ruido,
y el mar borra sobre la arena
el paso de los amantes que se separan.
Las hojas muertas se recogen con un rastrillo.
Los recuerdos y las penas, también.
Pero mi amor, silencioso y fiel,
siempre sonríe y le agradece a la vida.
Yo te amaba, y eras tan bella...
¿Cómo crees que podría olvidarte?
En aquel tiempo la vida era más hermosa
y el sol brillaba más que hoy.
Eras mi más dulce amiga,
mas no tengo sino recuerdos
y la canción que tú me cantabas.
¡Siempre, siempre la recordaré!
Poema de Jacques Prévert.
(Este poema, con los títulos de "Las hojas muertas", "Les feuilles mortes", "Autumn leaves", etc., y música original compuesta por Joseph Kosma, ha conocido versiones muy diversas e intérpretes distintos, en muchos casos -creo yo- con todo merecimiento para ser escuchadas.)
Que bueno Sr. Carrascosa. Gracias por darnos entretenimiento en estos largos y calurosos dias aeroportuarios. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias a ti por tu comentario. Yo también me entretengo en largas y calurosas noches. La música es un excelente antídoto para el veneno de nuestro trabajo.
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