domingo, 19 de mayo de 2013

MALA VIDA

EL ENANO OREJUDO


"El Petiso Orejudo", apodo dado a Cayetano Santos Godino (Buenos Aires, 31 de octubre de 1896 -Ushuaia, 15 de noviembre de 1944), fue un asesino en serie que asoló la ciudad argentina de Buenos Aires con sólo 16 años. A principios del siglo XX fue responsable por la muerte de cuatro niños, siete intentos de asesinato y el incendio de siete edificios.
Nació en la ciudad de Buenos Aires el 31 de octubre de 1896. Era hijo de dos inmigrantes calabreses, Fiore Godino y Lucia Ruffo. Su padre era un alcohólico golpeador que estaba enfermo de sífilis. Entre los cinco y diez años Cayetano concurrió a varios establecimientos educativos, de donde siempre era expulsado. 
El 28 de septiembre de 1904 y con sólo 7 años comete su primer delito: llevó a un terreno un niño de 21 meses de edad, donde lo golpeó hasta que fue detenido por un policía. En 1905, con el mismo modo, Cayetano llevó a su vecina Ana Neri, de 18 meses de edad, a un baldío donde comenzó a golpearle la cabeza con una piedra. Afortunadamente un policía volvió a detenerlo.
En marzo de 1906, volvió a llevar a una niña a un baldío donde intentó estrangularla y luego la enterró viva. A los 10 años Cayetano pasaba el tiempo torturando animales, hasta que fue descubierto por su padre y fue recluido en la Alcaldía Segunda División más de 2 meses.
El 9 de septiembre de 1908 intentó ahogar a González Caló, de 22 meses de edad, pero nuevamente fue detenido a tiempo y liberado al otro día.El 15 de septiembre intentó quemar los párpados de Julio Botte, de 20 meses, pero esta vez consiguió huir. El 6 de diciembre los padres volvieron a llevarlo a la comisaría, pero esta vez permaneció encerrado tres años en la Colonia de Menores de Marcos Paz. A pedido de sus padres fue liberado el 23 de diciembre de 1911, pero a diferencia de lo que se esperaba su violencia empeoró.
El 26 de enero de 1912 fue encontrado muerto en una casa desocupada Arturo Laurona, de 13 años.El 7 de marzo de ese mismo año incendió el vestido de Reyna Vainicoff, de 5 años, quien murió días después. A finales de septiembre incendió una estación de tranvías. El 8 de noviembre intentó estrangular a Roberto Russo, pero fue detenido. Esta vez fue procesado por intento de homicidio, pero fue liberado por falta de méritos.A finales de noviembre incendió dos galpones.
El 3 de diciembre de 1912 encontró a Jesualdo Giordano jugando en la puerta de su casa, le ofreció comprarle caramelos y logró llevárselo a una quinta cercana, prometiéndole más caramelos, lo convenció de entrar. Allí tiró al menor al suelo e intentó estrangularlo con la soga que llevaba como cinturón, pero como se resistía cortó la soga y la usó para atarle las piernas y las manos. Comenzó a golpearlo hasta que tuvo la idea de introducirle un clavo en el cráneo. Comenzó a buscar un clavo y se encontró con el padre del menor en las afueras de la quinta, le dijo que no sabía donde se encontraba su hijo e ingresó nuevamente a la quinta con el clavo. Pensando que Jesualdo Giordano se encontraba todavía vivo, tomó una piedra que usó como martillo. Después de introducirle el clavo en el costado del cráneo, cubrió el cuerpo con chapas y huyó del lugar. El cuerpo fue encontrado minutos después por el padre de la víctima. Cayetano fue al velorio de su víctima, al acercarse al ataúd decidió tocarle la cabeza para comprobar los efectos del clavo.
Un día de 1906 el empleado municipal Fiore Godino entró en la comisaría décima, a los gritos y clamó ayuda para controlar a su propio hijo, Cayetano Santos Godino, de sólo 9 años. yo no puedo con él! Es imposible dominarlo. Rompe a pedradas los vidrios de los vecinos, les pega a los niños del barrio...y si lo encierro es peor, se pone como loco. Un dìa había matado a los canarios del jardín y les había arrancado los ojos y las plumas y me los dejó abajo del la almohada.
En el diagnóstico se destacaban sus características físicas: la escasa talla (medía 1,51 metros), la cabeza pequeña, la extensión de sus brazos (abiertos alcanzaban 1,85 metros), sus orejas desmesuradas,su miseria física y la desmesura de su órgano sexual. Todo conducía a una conclusión:estaba predestinado al crimen
El doctor sostuvo este diálogo con el “Petiso Orejudo”:
-¿Es usted un muchacho desgraciado o feliz?
-Feliz.
-¿No siente remordimientos por lo que usted ha hecho?
-No entiendo.
-¿Por qué incendiaba las casas?
-Porque me gusta ver trabajar a los bomberos.Cuando ellos llegaban yo les colaboraba acercándoles baldes con agua.
¿Qué pasaba por la mente de Godino cuando cometía los crímenes? Según sus propias palabras, una fuerza ingobernable lo dominaba, el dolor le partía el cráneo y ese sufrimiento sólo se aliviaba golpeando, matando. Sin embargo, todos los exámenes médicos descartaron que padeciera epilepsia.
De su vida de recluso se sabe poco. Apenas alguna anécdota como la siguiente: en 1933, consiguió detonar la furia de los presos porque mató al gato mascota del penal arrojándolo junto con los leños al fuego; le pegaron tanto que tardó más de veinte días en salir del hospital.
Las circunstancias de su muerte, ocurrida en Ushuaia el 15 de noviembre de 1944 siguen siendo nebulosas. Supuestamente murió a causa de una hemorragia interna causada por un proceso ulceroso gastroduodenal, pero se sabe que había sido maltratado y, con frecuencia, violentado sexualmente. Sobrellevó los largos días de la cárcel, sin amigos, sin visitas y sin cartas. Murió sin confesar remordimientos.
El penal de Ushuaia fue finalmente clausurado en 1947. Cuando el cementerio fue removido sus huesos ya no estaban.

La entrada anterior es copia del contenido de la página http://www.psicofxp.com/forums/mi-primer-tema.324/559630-el-enano-orejudo.html

Para ampliar información: http://osvaldoraffo.wordpress.com/2012/10/02/historias-de-criminales-famosos-cayetano-santos-godino-el-petiso-orejudo/ 

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